Actualización en tres campos de acción
por Tito Alvarado
Introducción
A partir de lo elaborado por Saul Alinsky (1909-1972), conocido como Tratado para radicales, hacemos una actualización, previo traducir el texto de Alinsky, del inglés al español. A diario nos enteramos de movilizaciones, se apaga una y aparece otra. Hablamos de gente movilizada en diversos lugares por diversas causas.
Hay algunos lineamientos generales que debemos tener en cuenta, primero está la causa, luego la respuesta, reaccionamos a un desquicio del sistema, este detalle no se aprecia en toda su magnitud, se tiende a luchar por la causa inmediata, desvinculada de la totalidad, que es el sistema que produce, a diario, atropellos contra el buen vivir de la gente.
Entregamos una traducción al español de las reglas escritas por Alinsky y desarrollaremos una actualización del Tratado para radicales, en tres campos específicos:
A) Acción en la calle
B) Dominio del discurso
C) Contrarrestar los medios de comunicación
Hasta la fecha, demasiadas veces hemos puesto los muertos, los heridos, en suma la sangre y el cuerpo. Nos conformamos con victorias pequeñas. El mundo avanza hacia un desastre cuyas consecuencias pueden terminar con la civilización humana, en otras palabras: asistimos a nuestro propio exterminio. El capitalismo nos está matando.
La historia del siglo pasado muestra portentosas victorias, como también colosales derrotas. No son las ideas lo que ha fallado, es el factor humano. Muchas veces nuestros análisis no han sido correctos, así como, demasiados líderes sucumben ante su propio ego.
No son salvadores lo que necesitamos, necesitamos mayor conciencia, buscar juntos las soluciones, ver lo particular en la perspectiva general, en otras palabras, se trata de actuar en forma local con una visión global y actuar en forma global con una visión local.
Escenarios
Los escenarios de lucha social en las calles tienen un fondo arquitectural distinto, sea en Haití, Ecuador, Chile, Cataluña. Las demandas son diversas, pero hay un fondo social, una exigencia de cambio común. Ya no se puede vivir de la manera que nos lleva a la muerte.
Como tampoco podemos quedarnos en las formas conocidas de protesta social. Se necesita crear formas distintas de movilización, analizar lo actuado y priorizar lo que resulta. Es urgente recurrir a la creatividad, innovación, análisis, organización.
Qué es estrategia:
Serie de acciones muy meditadas, encaminadas hacia un fin determinado.
Arte de proyectar y dirigir las operaciones militares, especialmente las de guerra.
Qué es táctica
Procedimiento o método que se sigue para conseguir un fin determinado o ejecutar algo.
Conjunto de reglas y procedimientos que se utilizan para dirigir las operaciones militares que se llevan a cabo en una guerra.
Salir a la calle con un plan, implica tener objetivos claros y capacidad de aplicarse en conseguirlos, es decir organización, tácticas y estrategias. Lo contrario a caos, improvisación. Un plan supone un cierto conocimiento del medio en que uno se mueve. Esto nos remite a tener una o varias estrategias y las necesarias medidas tácticas a aplicar en la consecución de nuestros objetivos
Tratado para radicales (autor Saul Alinsky, traducción T. A.)
Regla 1:
El poder no es solo lo que tienes, también es lo que el enemigo piensa que tienes.
El poder se deriva de dos fuentes: dinero y gente. Los que nada tienen deben construir poder desde su cuerpo y su sangre.
Regla 2:
Nunca salir de la experiencia de tu gente. Resulta en confusión, miedo y deseos de marcharse. Sentirse seguro es la columna vertebral de cualquier persona.
Regla 3:
Siempre que sea posible, salir de lo que el enemigo sabe hacer. Buscar formas de aumentar su inseguridad, su ansiedad y su incertidumbre.
Regla 4:
Hacer que el enemigo cumpla con su propio libro de reglas. Si la regla es que cada carta recibe una respuesta, envía 30,000 cartas. Se les puede matar con esto, porque nadie puede obedecer todas sus reglas.
Regla 5:
El ridículo es el arma más potente del hombre. No hay defensa. Es irracional. Es irritante. También funciona como un punto de presión clave para obligar al enemigo a hacer concesiones.
Regla 6:
Una buena táctica es lo que disfruta tu gente. Seguirán haciéndolo sin basilar y volverán a hacer más. Están haciendo lo suyo e incluso sugerirán mejores.
Regla 7:
Una táctica que se prolonga demasiado se convierte en un lastre. No hay que convertirse en viejas noticias.
Regla 8:
Mantener la presión en forma constante. Nunca rendirse. Seguir intentando cosas nuevas para mantener a la oposición fuera de balance. A medida que la oposición domina un enfoque, golpéalos desde otro flanco con algo nuevo.
Nota:
Alinsky usa el término oposición no en el sentido de oposición al gobierno, sino como una forma genérica de llamar a nuestros oponentes.
Regla 9:
La amenaza suele ser más aterradora que el hecho mismo. La imaginación y el ego pueden crear muchas más consecuencias que cualquier activista.
Regla 10:
La mejor premisa para las tácticas es el desarrollo de operaciones que mantengan una presión constante sobre la oposición. Esta presión incesante se nota en las reacciones de la oposición, son esenciales para el éxito de la campaña.
Regla 11:
Si se empuja una desventaja lo suficientemente fuerte, esta se convertirá en una ventaja. La violencia del otro lado puede ganar al público hacia tu lado, porque el público simpatiza con el desvalido.
Regla 12:
El precio de un ataque exitoso es una alternativa constructiva. Nunca dejar que el enemigo anote puntos por no tener una solución al problema.
Regla 13:
Elegir el objetivo, congelarlo, personalizarlo y polarizarlo. Cortar la red de soporte y aislar el objetivo de la simpatía. Ir tras las personas, no las instituciones; a la gente le duele más rápido que a las instituciones.
Análisis breve
El tratado de Alinsky está dirigido a personas que luchan en un contexto de oponerse a una medida del gobierno, sin poner en duda la totalidad del sistema. Sirve para avanzar un poco, salvo que el sistema puede retroceder sin que cambie lo esencial en su forma de dominación.
En el contexto de lucha social mayor, es decir, por cambios profundos, estas trece reglas aportan solamente unas cuantas verdades y sobretodo sirven para vernos en el avance de nuestras ideas. Ya no es posible continuar con luchas separadas, por simples mejoras salariales, suficiente falta de humanidad ha mostrado el sistema. La unidad de las personas en una acción es la unidad de sus luchas, por muy diversas que sean.
Hoy en día sí las luchas sociales no tienen como objetivo el cambio de sistema, son un simple intento de mejorar lo inmejorable.
Hacer la diferencia
Dice el libro gordo de María Moliner:
Manifestación
Acción y efecto de manifestar algo o de manifestarse.
Protesta
Manifestar oposición a una cosa por considerarla ilegal, falsa o ilegitima. Tiene relación con; quejarse, rebelarse, rechazar, reclamar, sublevarse.
Rebelión
Acción o estado de los que se han rebelado contra el gobierno o las autoridades.
Rebelarse
Negarse una persona a obedecer a quien tiene autoridad sobre ella.
Entonces, según el uso de la lengua, ante los daños que el sistema causa a la vida en sociedad, las víctimas podemos pasar de una manifestación a la protesta y de esta a una rebelión y mejor aun si esta es generalizada.
Nuestro destino no es ser simples entes que lleva el viento, por nuestros actos somos creadores de realidad y esta puede y debe responder a las necesidades de cada cual, que es una persona individual y parte de un colectivo a la vez. Todos actuamos en dependencia con otros.
Peligros
Los peligros que enfrenta toda movilización son siete:
1.- no siempre hay claridad de objetivos ni se vincula lo particular a lo general,
2.- fácilmente nos perdemos discutiendo asuntos secundarios,
3.- nos infiltran con agentes que promueven acciones abominables,
4.- si no hay avances rápidos, la gente tiende a cansarse y decae la lucha,
5.- muchas veces las organizaciones políticas no están a la altura de los acontecimientos,
6.- el poder recurre a diversas estratagemas de represión,
7.- los medios de comunicación están al servicio del sistema.
Leyes generales
Todo acto de rebelión, no solo es un acto ético, es también un acto de creación heroica.
Una protesta sabemos como comienza, no sabemos como terminará.
En la acción van saliendo liderazgos y se van clarificando las ideas.
Si la protesta amenaza la estabilidad, siempre frágil, del sistema, este recurrirá a formas brutales de represión.
Es aquí donde algo pacífico se transforma en violento. Ponemos el cuerpo, la sangre, la audacia.
Rebelarse es un derecho, defenderse ante la agresión del sistema, es un derecho sagrado.
Que una protesta sea pacífica no significa que no podamos ni debamos defendernos.
Todo objetivo inmediato debe estar en concordancia con los objetivos generales.
El poder de ellos se nutre del miedo de nosotros. Perder este miedo es, será, nuestro mayor poder.
El poder no solo recurre a la represión, lo hace en un contexto de mentiras, engaños y creación de escenarios que les favorezcan.
El poder siempre hablará de negociaciones cuando se vea acorralado, es el preludio de la derrota.
Nosotros tenemos la ética de la verdad, somos mayoría, manejamos tecnología que permite comunicar directamente, nos coordinamos en la necesidad.
Una vez que se asume la lucha, esta debe llegar hasta el final.
Actualización:
A) Acción en la calle
Toda acción en la calle tiene algo de certeza y mucho de incertidumbre, se hace por una causa que se estima justa. Acorde a la visión de quienes participan en la movilización callejera, esta se realiza con un grado de ira o pasividad.
La certeza dice relación con saber el motivo de la acción, la incertidumbre está dada por la respuesta del sistema, puede ser ignorada o reprimirla de forma brutal. En este caso siempre estamos preparados para lamentar, pocas veces para ejercer el sagrado derecho a la autodefensa. Es aquí donde debemos mostrar nuestro poder y creatividad, programando acciones diversas que descontrolen al enemigo.
Nadie, nunca debe quedar desamparado a merced de los represores, si atacan a uno debieran aparecer diez para defenderlo, esto es romper con la forma en que se protesta, del caos pasar a la organización donde cada cual sepa cual es su grupo de acción y su respuesta.
Nuestro poder está en la organización y la cantidad.
En la calle mucho se improvisa, esta improvisación muestra el enorme potencial creador de quienes no han tenido oportunidad de mostrar sus capacidades, esta improvisación debe estar siempre en concordancia con los objetivos generales, es un momento de creación heroica.
Si hablamos de una protesta o algo mayor y prolongado, una rebelión, la calle no necesariamente es un escenario conocido ni forma parte de la experiencia de la gente. La seguridad aquí estará dada por sentir la solidaridad de los demás.
El enemigo es el aparato represivo. que en principio se expresa suavemente y luego lo hace con la mayor violencia que pueda ejercer. Ellos saben aislar personas, correr y apalear, en el mejor de los casos; en el peor, disparan, matan. De como ellos reaccionan, sabemos, por lo mismo, es imprescindible estar preparados para sus posibles respuestas. La ciencia y la técnica pueden ser nuestros mejores aliados.
Crear en ellos incertidumbre es actuar de distinta manera cada día.
Toda acción debe ir en aumento, en este sentido desde la calle una amenaza debe ser respaldada con acciones concretas.
Una manifestación en la calle puede ser una manifestación de arte, una oportunidad para desarrollar creatividad que aporte sentido de pertenencia a algo sublime, nosotros ejerciendo nuestros poderes.
B) Dominio del discurso
Nuestro poder son las razones por las que se lucha, el ejemplo de otros luchadores, la creatividad de cada cual para posicionar nuestro discurso.
En general hay algunos aspectos en contra: la tendencia a vernos como víctimas, la percepción negativa del uso de la violencia por nuestra parte, la poca preparación de nuestros cuadros, muchos hablan para los ya convencidos.
Poder es en este caso, expresar los objetivos con la mayor amplitud.
Quienes dominen el arte de hablar debieran ser los encargados de transmitir el discurso de la manifestación y hacerlo a partir de la meta a lograr.
C) Contrarrestar los medios de comunicación
Nuestros medios van de escasos a ninguno. En cambio el sistema tiene los grandes medios (des) informativos y controla la tecnología, a nosotros nos quedan las redes sociales, la organización social, los sindicatos y partidos (hay honrosas excepciones) o movimientos libertarios.
Falta generar un discurso opuesto al sistema en todos los frentes. Que sea inclusivo, didáctico y toque lo que la gente y el momento requieren. Nos movilizamos por una causa puntual que está asociada a la esencia del sistema, por lo mismo nuestro discurso debe mostrar las causas profundas.
Los grandes medios de comunicación son parte del problema, no podemos esperar de ellos objetividad, simpatía, cobertura imparcial o que transmitan lo esencial de nuestros objetivos.
Entonces nos queda la tarea de implementar la puesta en circulación de las ideas de fondo a la vez contra atacar lo que digan los medios.
Resaltar el disfrute de la ineludible acción en pro de un bien común.
Saul Alinsky
Saul Alinsky (1909-1972) ue un activista y pensador estadounidense, considerado el "padre" del community organizing, una corriente estadounidense de organización comunitaria. Participó en la organización de los guetos negros de Chicago y Nueva York, animó la constitución de las primeras fundaciones y asociaciones del organizing.
En 1971 escribió Tratado para radicales con el fin de conectar con la gente y poner en marcha tácticas y campañas divertidas y eficaces. Trece reglas prácticas que parten de un análisis realista de la situación y que básicamente tienen un solo objetivo: demostrar que con organización sí se puede arrancar parte del poder a los poderosos, que nuestro horizonte puede ser la revolución.
Además de Tratado para radicales, escribió en 1946 Reveille for Radicals, sin traducción al español.
Además de Tratado para radicales, escribió en 1946 Reveille for Radicals, sin traducción al español.
Quién soy yo
Poeta, ensayista, periodista, conferencista, promotor cultural, organizador de sueños posibles y sobre todo defensor de causas perdidas.
Nací cuando el mundo era otro, al sur, en un pueblo chico. He recorrido caminos, conocido gente y visto de todo, que ya de nada me asombro.
He escrito muchos libros y publicado 24, traducido al inglés, francés, portugués y algo más.
Miembro de la Presidencia Internacional de Proyecto Cultural SUR. Miembro de equipo de coordinación del Festival Internacional de Poesía Palabra en el mundo. Miembro del equipo de redacción de Utopía Roja. Miembro del movimiento Artistas por la Paz.
Creo en el ser humano. Me esmero en demostrar que hacia adelante, el único camino es la convivencia social organizada en forma solidaria. Trabajo, junto a otros miles, por Revolución cultural. Una vez al año, como poeta itinerante, recorro algunos puntos del planeta esparciendo esperanza, proponiendo soluciones, plantando y/o sembrando árboles. Sobrevivo en pleno bosque, en una región del norte.
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